Negros tus ojos que se ha de comer el silencio.
Carnosas las mejillas
que he de besar
algún día.
Lujuriosa tu boca
como fruta fresca,
Y arrebatadora
estampa que me acompaña
en mi negrura.
Negrura que el alba
blanquea y me saca de la rutina.
Silencio que se rompe
al golpeo de mis latidos
Cuando por fin ante
mí te muestras como fantasma vencido
Como amante
reconocido.
Gracias por venir hasta aquí y dejar vuestros comentarios.
ResponderEliminarUn abrazo grande.
Eva
Pasaba por tu casa y no quiero irme sin saber algo de ti. Leo tu entrada y como siempre, fiel a tu estilo, de magnífica escritura y con palabras concisas para explicar tu sentir hacia esas sombras.
ResponderEliminarUn beso. Espero que sigas bien y feliz, ocupada ya sé que si.
Gracias Loli, estoy bien, apenas subo escritos al blog por falta de tiempo y por qué no decirlo... de inspiración. Te agradezco tu visita y tu comentario siempre tan bueno.
EliminarUn abrazo grande,
Eva Ruiz
SaludosEva. Encantada de seguirte y espero en breve poder comprar tu libro de poesía o hacer algo juntas
ResponderEliminarGracias Ángela! Ojalá algún día ocurra una de esas cosas, o las dos...
EliminarAbrazo grande
Eva